Haciendo la migración de contenidos para la nueva web de MolinoLab, he encontrado éste post sobre la reforma de la nave y pensé en actualizarlo, ya que ha cambiado mucho y gran parte de lo que nos propusimos con este espacio, lo hemos conseguido, está mucho mejor de quizá lo que llegábamos a imaginarnos. Con el objetivo de conservar el post intacto, creamos este otro con la actualización, el antes y el después de la nave y el estudio de MolinoLab.
Este es el resultado a verano del 24, el antes y el después de un almacén de aperos, de trastos y herramientas convertido en el epicentro de un espacio de creación artística y cultural.
2020 – La nave
2020 – El estudio
2024 – La nave
2024 – El estudio
El proceso de rehabilitación
Durante los últimos cuatro años hemos trabajado muy duro por limpiar, arreglar, retejar, construir, reconstruir, aislar, pintar y disfrutar este espacio. Hemos desarrollado muchas habilidades entre esas cuatro paredes. Picar paredes, retirar tejas, soldar, contruir paredes, poner ventanas, poner tejas (Tanto las árabes como mixtas), hecho suelos, puesto tarima, etc.
Uso y disfrute del espacio
También son innumerables la cantidad de talleres, jornadas de creación, reuniones, charlas, performances que se han realizado dentro, y las que quedan por realizar. Muchas son las personas que han ayudado a que la nave se vea como se ve ahora, las mingas con el grupo de mujeres rurales para limpiarla y vaciarla, las enseñanzas de Manolo sobre albañilería y soldadura, Colocando ventanas y vigas nuevas con Salomé, Pablo, Guille, Joaku, Eva… Muchos amigos que pusieron su granito de arena para poder disfrutar de un espacio así.